Los expertos que participaron en el webinar ‘Energías renovables y movilidad eléctrica. Energía limpia como motor económico y sostenibilidad medioambiental’ organizada por el Club Diario de Ibiza con el patrocinio de Palau Sistemas Renovables, dejaron claro que el camino hacia un modelo de transición energética sostenible es la única opción gracias a los cambios normativos que reducen los costes y la certidumbre hacia el futuro.
La mesa de expertos celebrada el martes contó con las aportaciones de Aitor Urresti, director general de Energía y Cambio Climático del Govern balear; Jordi Salewski, concejal de Medio Ambiente y Transición Energética del Ayuntamiento de Eivissa; Javier Tomás, director de la Universidad Corporativa Power Electronics; Alejandro Labanda, director de Estudios de Unión Española Fotovoltaica (UNEF) y Eduardo Mezquida, CEO de Palau Sistemas Renovables.
Aitor Urresti comenzó su intervención recordando que en 2030 los objetivos son reducir las emisiones en un 40% y conseguir que al menos un 35% de la producción energética proceda de fuentes renovables. «El reto es llegar a 2050 con un sistema prácticamente descarbonizado basado al 100% en energías renovables», avanzó el director general de Energía y Cambio Climático.
Para lograrlo, desgranó algunas de las ayudas tanto para particulares como para empresas e incluso para entidades públicas. «En 2010 están presupuestados cinco millones de euros para ayudas al autoconsumo donde habrá una reserva mínima por isla», destacó. También avanzó que el plan Moves II de Incentivos a la Movilidad Eficiente y Sostenible contará con 2,5 millones de euros en los próximos dos años y apuntó que Balears es una de las comunidades donde mejor ha funcionado este programa. En este sentido apuntó que «la movilidad es clave en las islas» y por ello las infraestructuras son fundamentales, por lo que en 2025 se pretende contar con, al menos, 1.000 puntos de recarga para vehículos eléctricos, de los que actualmente hay 500.
Recarga en zonas turísticas
Uno de los proyectos en los que trabaja el Govern, cuya convocatoria saldrá a licitación en primavera por valor de unos tres millones de euros, es la instalación de puntos de recarga en zonas turísticas con gran afluencia pero alejadas de los núcleos urbanos, una demanda de la hostelería, los concesionarios de venta de vehículos y las compañías de alquiler de coches. Además Urresti insitió en que es fundamental replantear el sistema de transporte público e individual e ir hacia modelos más sostenibles.
El Govern licitará
la instalación de puntos
de recarga
en zonas turísticas
Jordi Salewski se mostró de acuerdo en fomentar una movilidad más sostenible y, como primer paso, se comprometió a pasar de nueve puntos de recarga para vehículos eléctricos a 16 en el próximo año. En la misma línea dijo que «no puede ser que en la isla, solo el 1% de la energía proceda de renovables».
Para incrementar la producción de energía con renovables y fundamentalmente con la solar anunció que próximamente el Ayuntamiento licitará nueve proyectos para la instalación de este tipo de energía y aprovechó para animar a las comunidades de propietarios y a los vecinos para que instalen energía fotovoltaica. «Desde el ayuntamiento ayudamos a la tramitación de las ayudas» y recordó que «en estos momentos no es tan caro».
Este mismo concepto ahondó Javier Tomás, quien insistió en que «la solar es la forma más barata para generar energía. Aunque no existieran ayudas seguiría siendo muy rentable».
En opinión del director de la Universidad Corporativa Power Electronics, «Eivissa es el lugar perfecto para instalar placas solares en los tejados de las comunidades de vecinos, en las viviendas unifamiliares y en los aparcamientos». También es una isla ideal para fomentar el vehículo eléctrico y la instalación de puntos de recarga, sobre todo en un momento donde las previsiones auguran que en 2025 los precios de los coches eléctricos estarán a la par de los de combustión, también bajará el precio de la recarga y aumentará la autonomía.
La reducción del coste y los cambios normativos que aseguran la certidumbre en el futuro son claves para apostar por el autoconsumo, en opinión de Alejandro Labanda. La gran variedad de instalaciones de autoconsumo individuales y colectivas en el sector residencial, en empresas de todo tipo, en industrias y en la hostelería, cuyo pico de consumo coincide con las hora de sol, hacen que la rentabilidad de las renovables sea muy alta.
Entre las numerosas formas de colaborar puso como ejemplo la posibilidad de que un polideportivo pueda compartir la energía que genera en su cubierta con un bloque de viviendas.
«Aunque no existieran ayudas, la energía solar seguiría siendo muy rentable»
El director de Estudios de Unión Española Fotovoltaica aseguró que «muy pronto el autoconsumo será algo tan sencillo como tener un electrodoméstico. Tenemos que concienciarnos de que es un método para recuperar la inversión en muy poco tiempo y disfrutar de energía gratis». Como dato aseguró que la fotovoltaica proporciona ahorros entre el 30 y 40% en la factura.
Ahorro y amortización
El ahorro fue también una de las variables esgrimidas por Eduardo Mezquida para apostar por la fotovoltaica. Puso como ejemplo una vivienda de 100 metros cuadrados cuyo ahorro puede estar entre el 40 y el 60% en el consumo diurno, en una instalación pequeña una factura mensual puede pasar de 66 a 43 euros y fijó entre 6.000 y 8.000 euros el coste de la instalación por lo que la amortización está entre cinco y ocho años. También destacó que «cuanto más grande es la instalación más económica es».
Como ejemplo el CEO de Palau Sistemas Renovables mostró el caso de éxito de un hotel en Sant Antoni que ha transformado una parcela de arena en un aparcamiento solar que produce con una potencia instalada de 94 kW el 20% del consumo del hotel, una amortización en siete años y que supone una reducción de Co2 de 36 toneladas que equivalen a 1.680 árboles.
Para Eduardo Mezquida «cambiar a energías renovables es la única opción, con la energía solar cuidamos el medio ambiente», un argumento en el que coincidieron los otros cuatro ponentes.
Con energía solar, una vivienda media puede ahorrar entre el 40
y el 60%
en la factura
«La transición energética no puede quedarse solo para los muy ecologistas o para los concienciados con el medio ambiente», reiteró Alejando Labanda, mientras que Jordi Salewski apostó por «una ciudad más amable y sostenible en la que el carril bici sea otro de los elementos que contribuya a la sostenibilidad».
Algo en lo que Javier Tomás ahondó ya que en su opinión «Eivissa tiene una buena oportunidad para diferenciarse y ser una potencia y un ejemplo en la movilidad sostenible».
Aitor Urresti fue mas lejos y expresó su deseo de la necesidad de concienciación y el cambio de hábitos hacia un modelo más sostenible. «No se trata solo de comprar un vehículo eléctrico sino de consumir menos y mejor».