A Mauro García Socuéllamos (Cuenca, 1957) le gustan las texturas y la pincelada gruesa, influencia, como explica, del impresionismo. Salta a la vista en su última exposición, ‘Cromatismo en equilibrio‘, que se inauguró el 7 de febrero en el Club Diario de Ibiza. También es evidente en esta selección que los colores vibrantes y «mediterráneos», en especial el azul, son su debilidad. Todos estos elementos se conjugan con «formas geométricas en danza» trazadas sobre los 24 lienzos que componen esta muestra, que se podrá visitar hasta el 27 de febrero. Lo que su creador pretende representar no son sólo «armoniosos espacios geométricos» sino también la realidad de la sociedad actual, que sufre las consecuencias de la crisis económica y que «tiene que hacer equilibrios para llegar a fin de mes».
En estas obras, realizadas entre 2014 y 2019, se puede comprobar la evolución de Socuéllamos, que comenzó creando obras figurativas, pero que, poco a poco, se fue «desviando hacia la abstracción». En esta muestra hay trabajos claramente expresionistas, como un lienzo en el que resalta la silueta de Dalt Vila o el cuadro que ha titulado ‘Jam Session’, dedicado al jazz. En las creaciones más recientes, las de este año, se observa que las formas se van reduciendo para tender al minimalismo. El artista conquense, afincado en la isla desde su niñez, utiliza tanto la pintura acrílica como el óleo. Además, emplea, en ocasiones, el collage. Un ejemplo de ello es la obra ‘La ciudad perdida’.
‘Cromatismo en equilibrio’ se podrá visitar de lunes a viernes de 18 a 20 horas.
Socuéllamos comenzó muy joven con la pintura gracias al maestro catalán Josep Ballús